lunes, 19 de agosto de 2013

Mi crónica del #ikaskide13 , a participar todo el mundo!

Desde hace un tiempo que tengo pendiente un post sobre las jornadas de #ikaskide13 ocurridas en Donosti durante los días 15 y 16 de julio y del cual escribí un post animando a su participación.  Ocurrieron gracias a dos personas que son la caña: Ainhoa Ezeiza ( @ainhoaeus) y Mertxe Badiola ( merxtebadiola).


Voy a desglosar en tres partes el post que pretendo desarrollar y escribir:

Escenarios cripto-fascistas:

Esta frase se la debemos a Patrick Davenne ( @pdavenne), como respuesta a los escenarios en donde se celabraban las jornadas. ¿ Son los espacios clásicos de las Universidades, centros no universitarios, etc válidos para la participación? ¿ Dónde queda la organización de los espacios en los centros formales? Conocemos que algunos poseen de aulas especiales pero,  ¿es suficiente? 

Esto cuadra perfectamente con la facilidad de participación que ocurre en otros espacios, ( vamos a llamarlo informales) como pueden ser los bares, jardines, playas, etc. Lo que se pretende comentar es que los escenarios son una parte fundamental de la participación. Además lo bueno es que es posible hablarlo en el mismo espacio donde se desarrolla sin tener que ser criticado por los guruses. 

¿Cambio en las personas? ¿ Vemos un cambio?

Últimamente hemos seguido con este debate en Twitter y es verdad como comentó @ainhoaeus que no es de fairplay decir que las personas no participan. Hay que distinguir en responder a lo que algunos dicen que viene un cambio y es ahí donde yo no veo ese cambio ya que más que instituciones, partidos políticos, etc...hace falta un cambio en nosotros ( la gente, yo me incluyo en este espacio) más allá de poder romper estructuras a través de las redes.

Por interés te quiero Andrés. Esta frase me la recordaba mi abuela cuando estaba con ella. ¿ Participamos porque queremos cambiar o transformar las cosas? ¿ O es nada más una presencia? Creo que la participación deber ser para algo más que para describir ya lo que hay o conseguir una identidad o reputación digital de " calidad" ( maldita palabreja)

¿ Dónde aprendemos? ¿ Por qué?

Una de las cuestiones que más me alegró y en la que vi un sentido fantástico de la reproducción de nuestra metodología fue cuando el maestro @eraser en medio de una charla nos invitó a pasar al bar a comer salmorejo y jamón serrano. ¿ Saben cuál fue su primera pregunta? Pues: ¿ A qué lo bueno y divertido siempre está fuera?

Pero es que además, después de él romper los espacios de forma radical, seguíamos reproduciendo en el bar nuestro rol pasivo a unos 3 metros de la mesa dónde se encontraba la comida. Estamos acojonados a perder el control, a participar o lo que sea. Desde mi punto de vista esto viene por varias razones: guruses ( hacen que se crea que los demás ya no podemos participar, lo que pongo yo tiene que valer por eso no sigo a personas en twitter ni participo...) y por supuesto reproducción de roles. El que da la charla da la charla, no te metas que puedes quedar mal.

¿Con las armas del sistema se puede cambiar algo?


Este es un debate muy interesante en el que hay que trabajar. Parece claro y por la historia que es muy complicado pero quiero creer que al menos a través de esas herramientas del sistema hay personas que se han unido reclamando un cambio. 


Personas ( aquí es donde veo yo el cambio)

No me puedo olvidar de la gente, de @eraser y su familia, de @ainhoaeus y la suya, de @margaojeda , @pvadenne, de @mertxebadiola y su maravillosa madre. También de @londones y su marido y de @orientacion.iesmc y demás personas que me dieron su afecto y participación en coches, playas, bares, etc.

Con ellos me siento uno más y eso es fundamental para la participación. Igualdad de roles con personas a las que yo considero cracks y con los que he aprendido más que en cualquier otro lugar de mi formación. 

En definitiva, animar a trabajar por el cambio, pero uno verdadero, no hacer MOOCs para quedar bien o PLEs preciosos para después no hacer nada. Hagamos todo eso pero en busca de la transformación, de la revolución de nuestro pensamiento. Mi sobrino, que acaba de nacer, lo agradecerá.

Un abrazo

7 comentarios:

Ainhoa Ezeiza dijo...

Muchas gracias por el post, lo incluiremos en la web de Ikaskide junto con otro montón de tareas pendientes (certificados, vídeos, más posts...)... Empezaremos septiembre a tope ;-)

Como comentamos en Twitter, siempre decimos que los espacios universitarios (aulas, salas de actos..) no promueven la participación, pero si #ikaskide13 fue así era precisamente una acción simbólica. ¿Hackear espacios? JA! Eso no es tan fácil, los tenemos grabados incluso cuando movemos el debate a la cafetería.

Pero no me doy por vencida, al contrario, seguiremos buscando claves para la participación también en espacios formales, y todo lo que sucedió en #ikaskide13 me está ayudando a pensar y mucho. ¿Anularon los espacios a las personas que se supone son participativas? Creo que sí. Pero al mismo tiempo los espacios se abrieron a personas que no proceden de esas líneas y les ayudó a verlos desde otra perspectiva.

Un abrazo y ¡disfruta mucho de tu sobrino, los bebés son alucinantes!

IES dijo...

¡Enhorabuena Carlos!, un nuevo sobrino es motivo de mucha alegría y de plantearse muchas dudas sobre qué mundo, qué sociedad van a recibir los pequeños que ahora nacen.
¿Cambios?, ¿rupturas del espacio-dimensión formal y no formal? Sí, se están produciendo, las crisis generan respuestas que, en la mayor parte de los casos, implican la necesidad de romper con estructuras anteriores, la clave es saber quién aporta esas respuestas rompedoras, alternativas que suponen una auténtica renovación. Puede que centremos nuestro foco de atención en la dirección no adecuada, por ejemplo, que esperemos una renovación que venga de la universidad y, sin embargo, el verdadero cambio esté en otro lugar, lo estén llevando a cabo personas que no están en el ámbito universitario-académico; recuerda la anécdota que referí contando cómo el presidente (rector) de Harvard reflexionó en Davos sobre cómo, de los antiguos alumnos de esta prestigiosa universidad, si había algunos que se podía decir que habían cambiado el mundo (Bill Gates y Mark Zukergber) ninguno de ellos dos había terminado sus estudios con ellos, debieron salir del ámbito universitario para que sus ideas revolucionaran nuestro mundo.
Felipe Rodríguez

Ainhoa Ezeiza dijo...

Hola Felipe, ¡qué bien "escucharte" por aquí también!

Un par de apreciaciones:
- Hacer cambios "en la cafetería" no cambia las estructuras de poder. Es lo que tratamos de escenificar en #ikaskide13 en (más o menos) contraste con #kfe. Son cambios en los márgenes del papel (en referencia a la conferencia de @eraser...)

- Bill Gates y Mark Zukergberg no han cambiado el mundo, por así decirlo. Las estructuras del poder siguen siendo feudales, lo que ha cambiado es que ellos ahora están en esas estructuras.

- Siempre en la historia ha habido casos muy potentes de personas que "se han hecho a sí mismas" al margen de la universidad, personas sin estudios, etc. Pero si una transformación personal solo nos lleva a que se incorporen en la estructura social... me temo que no vamos muy lejos. De hecho, se dice que los ex-fumadores suelen ser los más radicales en contra de los fumadores... ya me entiendes ;-)

Un abrazo,
Ainhoa

IES dijo...

¡¡A las barricadas!!

Jesús Hernández dijo...

Me ha encantado tanto el post como los comentarios. Las relaciones deben ser horizontales sin gurús de por medio, rompiendo la relación tradicional profesor alumno. Las personas que realmente valen no necesitan colocarse encima, contribuyen a transformar el mundo.
Enhorabuena Carlos!!!
Lástima no haber estado por ahí.
Un abrazo para todos

Carlos González Ruiz dijo...

Gracias a todos/as por los comentarios.

Ainhoa, el hecho de hackear espacios es visto como algo que va en contra del sistema propio con lo que es no es muy bien recibido por aquellos integrantes del sistema. De ahí la importancia de #ikaskide13.

Felipe, aunque es verdad que estas dos personas han cambiado el mundo de una forma u otra, si que es verdad como dice Ainhoa que se han seguido reproduciendo las estructuras de poder formales de una forma vertical alucinantes, con lo que un verdadero cambio tampoco se ha producido en lo que respecta a la participación.

Jesús, me ha encantado, las personas que realmente valen no necesitan colocarse por encima, me la guardo ;)

Un abrazo a todos/as!

Mercedes R. dijo...

Todo va llegando cuando abrimos la puerta a la vida 2.0:-)

En primer lugar, gracias por vuestra acogida en un contexto nuevo para mí. Sentirse integrada y cómoda es parte del incipiente diálogo.

Te leo Carlos y leo a tu excelente recomendación de que leyera a Helen Simons ¡gracias!.

Y al pensar y repensar me viene a la memoria esta cita que me ayudó mucho a entender algunas relaciones de espacios, personas, claustros y equipos varios....

Decía Álvaro Marchesi, en el año 2000, que la cultura de una escuela se refiere a un nivel profundo de actitudes y relaciones que mantienen los miembros de una comunidad educativa, especialmente los profesores. La manera de entender la enseñanza, los acuerdos y desacuerdos, los afectos y las tensiones, las expectativas y las frustraciones, los compromisos y las rivalidades, las tradiciones que se mantienen o se olvidan, las fiestas y las actividades que se realizan en común, las imágenes que profesores, padres y alumnos tiene los unos de los otros, son todos ellos expresión de la vida interna de un centro, de su cultura.

Asi que un encuentro de esas características en esos espacios apoyado por alguien del equipo de gobierno que lo presenta con afecto hacia Ainhoa , es un incipiente cambio; dialogar en una aula personas de distintos ámbitos y que no se conocen con anterioridad, sin jerarquías, es un incipiente cambio; no fue distante ni distinto el diálogo en otros espacios menos formales cuando el clima de afecto y participación se sumó, incipiente cambio; saltar de un tema a otros, de cómo hacer una tesis doctoral, cómo cocinar unos chipirones,fotografiar paisajes, compartir nuestros paisajes remotos, distintos y distantes, intercambiar experiencias vitales desde edades distintas...es un cambio incipiente.

Los cambios culturales son lentos pero si se encuentra la aguja, el hilo y el punto adecuado...el tejido social se puede coser. Soy incipientemente optimista :-))))
Gracias por tu afecto Carlos.
"la londones"